29 de febrero de 2012

Vino: ¿esto es lo que viene?

El vino se ha convertido en una importante cantera de ideas. Algunas de las innovaciones son interesantes y otras resultan más bien bizarras. En esta nota pasamos revista a algunas de las novedades más destacables.

 
El vino por copa llega al supermercado: así nomás, clarito como el agua, ahora en Estados Unidos y Francia se puede comprar vino por copa en la góndola de las bebidas del súper. Se trata de dos productos llamados “Copa di vino” y “Le Frogglet”, una innovación interesante pero estéticamente poco feliz aún. Ni más ni menos que una copa de plástico que, valiéndose del cierre de aluminio que usan los yogures, busca vender pack de seis y doce unidades ready to drink, para llevar de camping o para tener en la heladera. Cuestan unos 3 dólares cada una. Más en copadivino.com.

El cartón se hace sobre: otra innovación que busca achicar la medida del vino (y también los costos) fue lanzada por la empresa italiana One Glass y, en pocas palabras, sería un pouch –envase de tetra pack, cuya forma no es cúbica, sino piramidal- que en este caso semeja una botella algo rústica. La medida de cada uno rinde 100 ml y lleva vinos de Toscana. Lo interesante de este formato es que resulta transportable y prácticamente irrompible –a diferencia de la copa de plástico-. Lo difícil será superar la mala prensa del cartón como envase de vino. Más en oneglass.it

Surtidor de vinos en el súper. El razonamiento detrás de esta innovación es el siguiente: si en los pueblos de Europa todavía la gente va con un bidón a la bodega y se lleva su vino, ¿por qué no poner un expendedor de vino a granel en el supermercado Auchan? En varias sucursales de la cadena gala existen una suerte de surtidores de vino –iguales a los de la nafta- en los que se rellenan las botellas con diversos vinos del país. El expendedor tiene una pantalla táctil en la que uno elije el producto, ingresa la cantidad que quiere y listo. Al final entrega un tiket para abonar en caja.

Vino en botella de 50 ml
. Una de las tendencias más fuertes en materia de vinos a nivel global es la búsqueda de formatos más chicos: ya existen botellas de 500 ml, de 375ml y de 187ml; y ahora se les suma un nuevo envase de 50ml, iguales a las de scotch que se venden en hoteles y paradores de ruta. No alcanza más que para una degustación de tres tragos, pero si lo que se busca es elegir uno entre muchos vinos de una bodega, la idea de comprarlos a todos en formato liliput puede resultar tentadora. En nuestro país, Urraca Wines es la pionera y el pack de seis cuesta unos $100 pesos.

Botellas de cartón. La industria del vino busca hace tiempo una alternativa al vidrio que, si bien es un envase muy completo, supone un alto costo en transporte debido a su peso. De ahí que uno de los desafíos más notables consista en bajar la cantidad de vidrio por botella o bien reemplazarlo. Este es el caso de la botella de cartón, una iniciativa de Green Bottle que propone un envase descartable y reciclable, con un interior compuesto por una bolsa de plástico reciclable inerte para el vino. Más en greenbottle.com.

Etiquetas decoradas por el consumidor: hasta ahora, sólo hemos visto dos ejemplos de esta innovación, bastante bizarra por cierto. Se trata de botellas cuyas etiquetas no están terminadas y pueden ser tuneadas por el consumidor, usando una planchuela con stickers. La más curiosa es la que lanzaron los australianos de SomeYoungPunks.com.au, que viene con una pin up girl, estilo 50’s y ligera de ropa, para que el fetichista de turno la vista con el traje que le guste. Eso sí, también hay una tipo Mr. Potato para crear el personaje de la botella a gusto y criterio del consumidor.

Esta nota fue publicada en La Mañana de Neuquén el 5 de febrero de 2012.

4 comentarios:

Ariel Rodríguez dijo...

¿Vino o viene? jaja, interesante la nota Joaquín.

Saludos

Joaquin Hidalgo dijo...

Es verdad, Ariel, ahora que lo decís, la nota se debiera haber llamado: "vino: lo que se vino". jeje.

Salú!

Unknown dijo...

Y acá cuándo viene???

Joaquin Hidalgo dijo...

Cristy,

me encantaría poder decirte que el futuro ya llegó (hace rato) pero la verdad es que como periodista aún no saqué licencia de futurólogo. En cualquier caso, algunas de estas cosas ya están dando vueltas por casa: las botellas chicas, por ejemplo; los pouch, según sé, están a la vuelta de la esquina.

Salú!